
El pirineo aragonés hoy actúa como telón de fondo en la auténtica boda heartmade de Jara y Juanjo, una pareja que se encontró por casualidades del destino hace casi 16 años y que lleva desde entonces riendo juntos y compartiendo momentos. Uno de los más especiales fue su particular fiesta del amor tal y como nos cuenta Jara “nuestra boda fue una mezcla entre campestre y boho, quizás. Pero diría que fue 200% nosotros. Sin protocolos, sin presiones, natural, divertida y para todo el mundo.”
Ligüerre de Cinca fue el lugar especial que eligió la pareja para festejar tan bonito día, un pueblo abandonado recuperado en la actualidad que les brindó la oportunidad de celebrar con los suyos durante tres días por todo lo alto. De ese modo, la boda se convirtió en un fin de semana inolvidable desde la barbacoa de bienvenida del viernes hasta el desayuno de despedida con vistas a la montaña el domingo.
El vestido de novia que eligió Jara no podía ir más acorde con su personalidad, una creación de plumeti con mangas acampanadas, ligera y sencilla firmada por una de las diseñadoras con alma más boho del panorama nacional como es Immaclé.
A sus pies, unos JustENE personalizados junto con un look beauty hiper natural con melena suelta elaborado por Victoria Pozo, tía de la novia.
Como detalle sentimental Jara lució como única hoya unos pendientes como homenaje a la madre de Juanjo: “Le encantaban esos pendientes, y quise llevarlos como recuerdo suyo.”
Por su parte Juanjo, que llevó un traje de Toni Barceló en bicolor, también quiso recodar a su madre con el prendido de su solapa en forma de tulipán blanco, de la misma manera que llevaban su padre y su hermano, en recuerdo a la flor favorita de ella. Un detalle que dispara directamente al corazón.
Después de una ceremonia muy divertida oficiada por los hermanos del novio y la novia y una de sus mejores amigas en la que no faltaron anécdotas y lecturas especiales llegó el momento de trasladarse al banquete. Un espacio espectacular dispuesto en mesas imperiales en el que destacaban tanto las guirnaldas de hortensias bajo una base de hojas verdes dispuestas sobre ellas, el medio arco de pampas y la organización de los wedding planners de Bodas de Cuento.
Mención a parte merece el trabajo decorativo a cargo de Azul Bereber, una tienda de decoración que entre otras maravillas dispone de las alfombras de estilo boho que se vieron en la boda.
De este modo, tuvo lugar el banquete ameno y distendido en el que no faltaron los detalles especiales como los informativos en la que la familia de la pareja aparecía como divertidos corresponsales, el kata que realizaron los amigos del novio para recordar su faceta como profesor de artes marciales o el curso exprés de ukelele para versionar varias canciones referentes a la pareja.
Así fue la boda de Juanjo y Jara, un magnífico día que quedará para siempre en la retina de todos los asistentes gracias a las impresionantes fotografías de Bang Bang You. Instantáneas capaces de plasmar la belleza del Pirineo oscense y el amor de esta pareja más allá de la pantalla. Esperamos que la disfrutes, y que como Jara te sumerjas en el universo de esta boda. “Si tengo que destacar algo, la boda la hicieron las personas que estuvieron en ella.”
De este modo, tuvo lugar el banquete ameno y distendido en el que no faltaron los detalles especiales como los informativos en la que la familia de la pareja aparecía como divertidos corresponsales, el kata que realizaron los amigos del novio para recordar su faceta como profesor de artes marciales o el curso exprés de ukelele para versionar varias canciones referentes a la pareja.
Así fue la boda de Juanjo y Jara, un magnífico día que quedará para siempre en la retina de todos los asistentes gracias a las impresionantes fotografías de Bang Bang You. Instantáneas capaces de plasmar la belleza del Pirineo oscense y el amor de esta pareja más allá de la pantalla. Esperamos que la disfrutes, y que como Jara te sumerjas en el universo de esta boda. “Si tengo que destacar algo, la boda la hicieron las personas que estuvieron en ella.”
























































¿Qué te ha parecido la boda
en el Pirineo Oscense?